Ricardo Penilla Rivas: trabajar este verano como socorrista en Liencres me ha permitido disfrutar con gente nueva que he conocido
El joven de 21 años, vecino de Arce que este curso finalizará el Grado de Enfermería en la Universidad de Cantabria, ha disfrutado de su primera experiencia profesional como socorrista de Cruz Roja Cantabria en la playa de Valdearenas, en Piélagos
1
A sus 21, el verano antes de finalizar el Grado de Enfermería en la Universidad de Cantabria, Ricardo Penilla Rivas ha disfrutado de su primera experiencia profesional como socorrista de Cruz Roja Cantabria en la playa de Valdearenas, en Piélagos.
“Mi vida está relacionada con los deportes acuáticos y el mar una de mis pasiones”, confiesa este joven vecino de Arce, quien asegura estar muy contento del trabajo desempeñado en uno de los arenales “más duros”. Eso sí, puntualiza, con “unos compañeros encantadores”.
Después de tres meses formando parte del equipo humano desplazado por Cruz Roja Cantabria en la playa de Valdearenas -uno de los cinco arenales en los que presta servicio para el Ayuntamiento de Piélagos- afirma que “lo más complicado es lidiar con la gente”.
“No saber a quién te vas a enfrentar es más difícil que analizar el estado del mar”, un trabajo “relativamente sencillo” en este arenal donde, según cuenta, “puedes ver todo lo que has aprendido en el curso de socorrista acuático, que se complementa con los conocimientos adquiridos de primeros auxilios y manejo del desfibrilador”.
En este sentido, recuerda que el consejo más repetido a lo largo de los meses de verano a los bañistas ha sido siempre el mismo, “que tengan precaución”. “En Valdearenas, un paso en falso y puedes estar al final de la corriente y nosotros -en referencia a los socorristas- ayudándote”, apostilla.
Preguntado por aquello que se lleva de la que ha sido su primera experiencia profesional, Ricardo Penilla Rivas responde que “los compañeros y el haber trabajado en una playa como Valdearenas”.
Sobre el futuro profesional, a falta de un último curso para finalizar el Grado de Enfermería, confía en trabajar se lo suyo, pero reconoce que, “si no tengo trabajo, no me importaría estar aquí”.
Ricardo Penilla Rivas admite que es difícil trabajar en verano cuando tus amigos hacen otras cosas. Sin embargo, asegura que “para mí ha sido un trabajo ideal, 100 por cien recomendable, una forma de disfrutar con gente nueva que he conocido”.